LOS CIUDADANOS, DE LA ANESTESIA A LA INDIGNACIÓN

 

Tan sólo han pasado 10 meses desde que colgué en esta misma página un artículo titulado “La ciudanía anestesiada”, y un año desde que el actual gobierno tomó posesión, y ¡cómo han cambiado las cosas!.

 

Parece increíble que en tan sólo 12 meses se pueda desmontar un estado de bienestar conseguido en tantos años. No queda prácticamente nada que no se haya recortado, salvo la Iglesia, esa sí que no se toca, seguramente por no enfrentarse con sus  responsables, aquellos que diariamente acuden a los actos religiosos. Esto no quiere decir que aquello en lo que ya se ha recortado no se siga recortando.

 

No es de extrañar la situación en la que nos encontramos. En esta época en la que tan de moda están las nuevas tecnologías, este gobierno, siguiendo las órdenes de Alemania, ha llevado a cabo el corta y pega de los programas aplicados en Grecia, Portugal y alguno más que tantos “éxitos” han tenido, y de los que están “disfrutando” sus ciudadanos.  El resultado en España ya lo sabemos.

 

Este Presidente de mirada perdida y sonrisa forzada repite una y mil veces, como un mantra, que está haciendo lo único que se puede hacer y que los resultados los empezaremos a ver pronto. Y todavía se permite echarle la culpa al gobierno anterior, a la vez que nos pide compresión, que no confianza, ya que esa no la tiene ni él.

 

¿Quién se acuerda ya de las elecciones, de su programa, de sus promesas, de la esperanza que iban a generar y de que al día siguiente de tomar posesión se acabarían todos y cada uno de los problemas? No me dirán que eso no es tener fe, lo que pasa es que la realidad no se parece en nada a lo que prometían ni al programa con el que ganaron las elecciones. ¿Cómo se puede interpretar esto como un fraude? Nos mienten ó no se habían enterado de cómo estaba la situación. Me quedo con la primera y con la segunda ya que, si no sabían cómo estaba la situación, después de llevar en la política más de 30 años, como es el caso del Presidente, y de estar gobernando en casi todas las comunidades donde el déficit se disparó, sería para echarnos a temblar, sabiendo en las manos que estamos.

 

Mentiras y más mentiras: no tocaremos las pensiones, la Sanidad, la Educación, la Dependencia, la Justicia, no subiremos el IVA, no subiremos el IRPF,  a los funcionarios nosotros no les bajaremos los sueldos, no tocaremos el desempleo (a la Secretaria del PP se le llenaba la boca manifestando que eran el partido de los trabajadores), etc. Eso sí, las grandes fortunas no se tocan. El que tiene dinero en paraísos fiscales, con sólo pagar un 10% de la rentabilidad de los últimos cinco años, solucionado. A los políticos ni tocarlos, hacemos un paripé para rebajar los concejales en los ayuntamientos pequeños y solucionado.   Con los desahucios, hemos tenido que sufrir el suicido de varias personas, para hacer otro paripé que no llegará a cubrir ni a 50,000, y de la Iglesia ni hablar, esto es sagrado, etc. etc.

 

Los pensionistas han visto cómo este año han perdido poder adquisitivo, un 1,9%, al no respetarse los acuerdos del Pacto de Toledo. Se les subió el IRPF, se les aplica el copago y en alguna comunidad el euro por receta, pero el PP se jacta de que no les han bajado las pensiones. Mentira. En  cuanto a la Sanidad, dejan fuera a las clases más desfavorecidas, entre las que están los emigrantes. Eso sí, algunos con una especie de seguro podrían ser atendidos si es que encuentran alguien que se lo pague. Privatizan hospitales, cierran Centros de Atención Primaria, y no pasa nada. Todo el personal sanitario y muchos usuarios en la calle, pero la razón la tiene el gobierno. En Educación se aumenta el número de alumnos por clase, se incrementan las horas lectivas a los profesores y se les retira la paga de navidad, al tiempo que se les maltrata con comentarios como que trabajan poco (son unos vagos). Se cierran comedores y se cobra por llevar la comida de casa. Además, se retira o se baja la cuantía de las becas, lo que imposibilita que muchos hijos de familias sin poder económico y en el paro puedan seguir estudiando. ¿Cómo es posible que en un momento en el que escasea el trabajo no se facilite el aprendizaje y la formación? Parece que por una parte nos dicen que hay que mejorar la Educación en España y fomentar la cultura del esfuerzo, pero está claro que no se facilita un camino y que la recompensa no va a ser para todos. La mayoría, por mucho que se esfuerce no la va a tener. Lo que realmente se está imponiendo es la cultura “ni-ni”,  sobre todo entre las personas que poseen un menor poder adquisitivo, ni pueden estudiar ni pueden trabajar.

 

En el tema de la Dependencia, esto es de juzgado de guardia.
Que a personas que sufren una discapacidad se les haya retirado en muchos casos el 80% de lo que venían percibiendo y que por ello no puedan seguir recibiendo asistencia, no tiene nombre.

 

El IVA lo suben al 21%. Pero ¿si la gente no tiene para gastar cómo lo va a pagar? El IVA de 0 es 0, así que cada vez hay menos ingresos. Con el IRPF, más de lo mismo: la justicia para el que la pueda pagar, el desempleo lo bajamos para incentivar a los desempleados a que busquen trabajo, y pasado un tiempo los dejamos sin nada.

 

Han gobernado por decreto prácticamente en todo, han conseguido sacar a todos los ciudadanos a la calle pero, eso sí, nadie tiene razón salvo el Gobierno,  que es el único que acierta, a las órdenes de Alemania. ¡Y todavía tienen la desvergüenza de pedirnos comprensión! Nos dicen una y otra vez que ya estamos cerca de empezar a crear empleo. Es curioso lo del mes de diciembre, no se crea empleo pero baja el desempleo y los afiliados a la Seguridad Social. Esto tendrá algo que ver con que un gran número de jóvenes, de ese 55% de desempleados,  se está marchando a otros países. La reforma laboral claro que creará empleo cuando se empiece a remontar, pero en calidad de esclavitud, con salarios mínimos y condiciones pésimas.

 

Bueno, para algunos el 2013 ha empezado bien, al menos dos han encontrado empleo. Uno de ellos, dirigente de las Nuevas Generaciones del PP de Madrid, que en el mes de julio del 2012 conducía en Cuba, habiendo agotado todos los puntos del carnet, y que tuvo la mala suerte de tener un accidente en el que fallecieron dos cubanos de la oposición.  Se le juzgó y le sancionaron con cuatro años de cárcel, pero ¡mira por dónde! aquí el gobierno sí que anduvo ágil y negoció para que la condena se pudiera cumplir en España. Ahora, para que no esté lejos de su familia  se le busca un puesto de trabajo de 50.000 euros con cargo al erario publico, del mismo que siguió cobrando mientras se encontraba en la cárcel en Cuba. El otro afortunado es el ex viceministro de Aznar y ex presidente de Bankia, actualmente imputado,  al que se contrata en Telefónica por tan sólo 200.000 euros para que participe en dos consejos de administración. ¿Será que Telefónica no puede subsistir sin tener en su nómina imputados? Ya ven cómo sí que se puede crear empleo, y es de suponer que de los 6.100.000 parados, que según la Unión Europea tenemos en España, hayan tenido la delicadeza de restar estos dos empleos creados este mismo mes.

 

Lamentablemente se ha cumplido con creces lo que ya adelantaba en febrero: hemos sobrepasado los 6 millones de parados, tenemos un número altísimo de familias en la indigencia que sobreviven gracias a las ayudas que les prestan entidades sin ánimo de lucro, que  además cada vez tienen más dificultades para cubrir las necesidades que les demandan.

 

Ya todos somos conscientes de que tenemos una generación perdida. ¿Dónde quedan los valores?  ¿Cuál es la recompensa para los que trabajan duro, declaran honestamente y que, en contra de lo que se les achaca, nunca han vivido por encima de sus posibilidades? ¿Cuál es la moraleja de esta realidad que vivimos? ¿Cómo es posible que se creen estos dos empleos y no pase nada? ¿Cómo es posible que echemos a nuestros jóvenes y que algún ministro se permita decir que se van porque son unos aventureros? ¿Cómo es posible que hayamos retrocedido a los años 70? Estamos creando un país para el que viva bien y para el que tenga dinero. El resto que se busque la vida, pero que no piense que va a poder  compartir mesa y mantel con el rico.

 

En fin, no es de extrañar que los ciudadanos estén en la calle, eso sí, que no inmortalicen las manifestaciones con imágenes, ya que serán sancionados.  Pero no nos debemos preocupar, algunos miembros del gobierno ven la solución a los problemas  invocando a Dios y a la Virgen. Esperemos que les escuchen y les indiquen el camino  a seguir.  Y que no sea demasiado tarde.