ZAMORA 25 DE JUNIO. PONCE, CASTELLA Y PERERA ABREN LA PUERTA GRANDE.

Con toros de Alcurrucén comenzó la feria de Zamora. Los toros bien presentados dieron un juego irregular en el ruedo, los tres primeros mansos y complicados para los toreros y los tres últimos buenos y con mucha transmisión a los tendidos. Ponce a base de paciencia consiguió sacarle algunos pases al primero, cortandole una oreja. En  el cuarto que lo brindó al publico, daria toda una clase de toreo, en linea con lo que nos tiene acostumbrados, levantando a los aficionados que ocupaban los tendidos en un 50 por ciento y que le pidieron con fuerza las dos orejas, que serían concedidas por el presidente. Castella poco pudo hacer con su primer toro, siendo ovacionado al final de la faena. En el quinto, un toro que embestia por abajo, le realizó una buena faena con capote y muleta, remtando con una estocada y cortando las dos orejas. Este toro derribó estrepitosamente al picador, quedando caballo y picador a merced del toro durante unos segundo que parecieron varios minutos. El caballo seria retirado para observación de los veterianarios y el picador en principio parece ser que nos sufrió ninguna cornada. Perera poco  pudo hacer con el tercero, a pesar de intentarlo todo, un toro que habia que sujetarlo mucho ya que a la salida de la muleta se iba a tablas, al final de la faena el presidente concería la oreja. Perera sería en el que cerraba plaza, en el que se la jugaria despues de una faena, en la que con capote y muleta dió series de mucha importancia,  dominando al toro en todos los terrenos. Al entrar a matar  fue cogido  en dos ocasiones, cayendo de cabeza en la segunda, al parecer sin mayores consecuencias. El publico le pidió con fuerza las dos orejas, concediendole el presidente una. Los tres toreros salieron por la puerta grande.  Buena corrida en general, con un cartel de lujo y con tres toreros que vinieron a Zamora a torear como se torea en Madrid o en cualquier otra plaza, una corrida en la que los aficionados se pusieron de pie en varias ocasiones para aplaudir a los tres toreros, en difintiva una corrida para hacer afición.