LAS VENTAS 11 DE JUNIO. SE CERRÓ LA FERIA CON LOS MIURAS FLOJOS Y SIN RAZA.

Se esperaban los Miuras con mucha ilusión, pero los Miuras de verdad, los que asustaban a los toreros y al publico ya han pasado a la historia. Los toros sin raza mal presentados algunos, escurridos casi todos,  flojos todos en general, fueron devueltos a los corrales  dos, que deberian haber sido cuatro. Con este material de desecho, dificil hacer una faena ni siquiera aliñada. Davila Miura se habia apuntado a la corrida de su tío y terminó toreando dos sobreros, un toro Buenavista y otro del Ventorrillo, con los que no llegó a acoplarse,  utilizando el pico de la muleta en todo momento, ante la broca de los tendidos del 6 y del 7.  Rafaelillo como siempre salió a por todas, pero se estrelló con dos toros sin fuerza y faltos de raza, siendo cogido por el cuarto y pasando a la enfermería al rematar la faena. Rubén Pinar dejó algun detalle con la muleta y poco mas. Termina una feria donde los toros en general han dejado mucho que desear, flojos, sin raza, sin casta, anovillados algunos, en fin se han traido toros de plazas de segunda para la mejor plaza del mundo, ante el desconcierto y el cabreo de los aficionados. Por lo bueno, destacaron las ganaderías de Victoriano del Rio y la de Rihuelga, y algún toro suelto que aprovecharon, Talavante, Urueña, Ginés Marín y Juán del Alamo. En cuanto a la presidencia, es para miraselo, han regalado orejas y han robado algunas, sin escuchar ni ver  los pañuelos de los aficionados. Le dieron la vuelta la ruedo a un toro de Rihuelga por el simple echo de que había acudido tres veces al caballo. En fin, una feria que no se merecen los aficionados que pasan por taquilla y aguantan en los tendidos 31 días esperando y confiando que los nuevos empresarios dieran respuesta a lo que la fiesta necesita.